Traición en Honduras

El presidente de Honduras acaba de afirmar en conferencia de prensa, en San José, Costa Rica, que los militares que dieron el golpe de Estado en su país han traicionado a Honduras.
Es toda una intentona de sobornar el estado derecho, es un grupo mal habido de militares, no son las fuerzas armadas completas, ahí hay buenas personas, se trata de personas cegadas, de una pequeña élite, aseguró el presidente hondureño.

El presidente de Honduras, Manuel Zelaya, dijo este domingo en Costa Rica que el lunes participará en la Cumbre de presidentes de Centroamérica, que se reúnen en la capital nicaragüense, en su calidad de gobernante de los hondureños.

"Voy a asistir mañana a Managua a la Cumbre de presidentes de Centroamérica", dijo Zelaya en esta conferencia de prensa que ofreció en compañía de su homólogo costarricense, Oscar Arias.
Zelaya, que aún vestia la ropa de dormir con que lo obligaron a salir del país, aseguró que sigue siendo el presidente constitucional de Honduras y que es el pueblo "y no un grupo de gorilas" el que puede sacarlo del poder.

El presidente hondureño, quien manifestó haber sido secuestrado por un grupo de militares este domingo y llevado por la fuerza a Costa Rica, aseguró que sólo es un huesped en este país y que espera regresar pronto a Honduras para completar su mandato, que concluye el próximo año.
Dijo además que la acción de los militares representa "un retroceso de 30 o 40 años, a la época de las dictaduras" en América Latina.

Advirtió además que "el pueblo hondureño no va a permitir jamás un gobierno surgido de la usurpación y la fuerza" y aseguró tener noticias de que los hondureños están en la calle oponiéndose a su derrocamiento.

Zeleya denunció que los golpistas cortaron los servicios de electricidad y teléfonos y han interrumpido las transmisiones de radio, lo que definió como un "verdadero acto delictivo".
Sobre los miembros de su familia, que se encuentra en Honduras, dijo que están refugiados en casas privadas, pero que teme por la seguridad de su esposa, que está siendo perseguida por los militares con la intención de secuestrarla.

Por su parte, el presidente Oscar Arias informó que está solicitando a todos los presidentes del Grupo de Río que acudan a la Cumbre Centroamericana de Managua este lunes, para debatir sobre la situación en Honduras.

Arias dijo que su gobierno repudia este golpe de Estado que definió como "un retroceso lamentable no sólo para la democracia hondureña, sino para la centroamericana, la latinoamericana y la de todo el continente".

Zelaya también hizo declaraciones para la privada radio RCN de Colombia, en las cuales instó a sus compatriotas "a defender sus derechos, desde las tribunas, desde las plazas públicas, desde los parques".

También se declaró dispuesto a perdonar a los militares de su país que dirigieron el golpe en contra de su gobierno.

"Soy cristiano, no soy rencoroso y sé perdonar, pero en este caso es un delito atroz que casi me cuesta la vida, porque me sacaron prácticamente en ropa interior de mi casa. Los llamo a pensar en sus familias, que los militares piensen que también son hondureños y que por el bien del país, no me pueden hacer esto", puntualizó.