domingo, 24 de mayo de 2009

Una cucharadita de sal menos y...

Por Ramón Barreras Ferrán

Con sólo pensar que el 33 por ciento de la población adulta cubana parece de hipertensión arterial y que esa enfermedad está vinculada de manera directa a las principales causas de muerte en la Isla, vale la pena dedicarle unas líneas y unos minutos de lectura al asunto, precisamente hoy, cuando se celebra el Día Mundial de ese padecimiento, bajo el lema: "Sal e hipertensión arterial".

Es cierto que el sistema de Salud cubano y el Programa Nacional de Prevención de Enfermedades no Transmisibles, auspiciado por el Ministerio correspondiente, dan absoluta prioridad a la detección y tratamiento de las personas hipertensas. No obstante, la presión arterial alta está ligada a hábitos alimentarios y de vida que tienen mucho que ver con la actitud individual de cada quien.

Debido a ello, este año han centrado la atención en el consumo de la sal. Especialistas aseguran que con una reducción de su consumo de 6 gramos al día, lo que equivale a una cucharadita de café, como recomienda la Organización Mundial de la Salud (OMS), podría reducir las muertes derivadas de la hipertensión entre 2,5 y 3 millones al año en el mundo.

El cloruro de sodio, tan utilizado en las comidas, desempeña un papel determinante en esta enfermedad que padecen mil 500 millones de personas en el mundo. Además, se trata de una dolencia con tendencia a incrementarse y que cada vez afecta a más jóvenes por debajo de los 30 años. Se estima además, que tres de cada diez hipertensos lo son como consecuencia de un consumo excesivo de sal, de ahí que los profesionales insistan en la necesidad de poner en marcha medidas dirigidas a reducir su consumo entre la población.

Existen estudios que demuestran que reduciéndola a los niveles aconsejados (6 gramos diarios), disminuiría la presión sistólica (valor máximo de la presión arterial) en 2,1 milímetros de mercurio y la diastólica (valor mínimo) en 0,2 mm. Estos datos, que pueden parecer modestos, no lo son, ya que si los pacientes redujeran su presión sistólica en 3 mm, descendería significativamente el número de ictus e infartos, aseguran estudiosos del tema.

Uno de los graves problemas es que hay personas que ignoran tener la presión alta. Las causas de esta falta de control son múltiples. Algunos entendidos en el tema han explicado que por un lado, muchos pacientes no creen que la hipertensión sea una enfermedad y adjudican su origen a un estado nervioo pasajero. Por otro, en muchas ocasiones abandonan el tratamiento por diferentes motivos.Textos médicos subrayan que a hipertensión arterial es una enfermedad de la pared arterial. En la mayoría de los casos la causa se desconoce y se denomina primaria, pero existe un componente genético o hereditario que provoca que una persona la desarrolle en algún momento de su vida. Este riesgo aumenta cuando ambos padres son hipertensos. En un pequeño porcentaje, la causa es secundaria a algunas enfermedades del riñón, las glándulas suprarrenales y algunos medicamentos. Finalmente, una causa importante es el consumo excesivo de alcohol.Se considera que una persona tiene hipertensión arterial cuando después de controles reiterados de la presión arterial ésta es igual o mayor de 140/90 mm Hg. Es adecuado insistir en que no se puede hacer el diagnóstico de hipertensión ni determinar su gravedad con una toma aislada de la presión.

Lo más importante en el tratamiento de la mayoría de los pacientes hipertensos son las medidas no medicamentosas, que incluyen el régimen de vida y de alimentación, y el control periódico de la tensión arterial. Los especialistas recomiendan al respecto: no fumar; no tomar más de 2 copas de vino al día (125-250 centímetros cúbicos); no ingerir alimentos salados; hacer ejercicios físicos a diario: paseo, marcha, carrera, gimnasia...; tratar de reducir el estrés y los factores emocionales adversos; corregir el posible sobrepeso, con ejercicio y dieta hipocalórica, y alimentarse de manera sana, incluyendo, sobre todo, verduras, fibras, frutas, grasa poco saturada, pescado y guisos caseros.

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